LOS FALSOS PREDICADORES QUE SABEN LA VERDAD Y MIENTEN SE IRÁN CON SU PADRE, EL DIABLO

Actualmente vemos como muchos falsos predicadores prefieren engañar a los creyentes para sacar un beneficio, fama o por otros motivos. Todos estos supuestos “hermanos” que hoy gozan de fama riqueza y una gran multitud de seguidores, yerran con la palabra y confunden a muchos hermanos y aparentemente consiguen salirse inmunes de este tipo de cosas, más Dios no dice eso.

2 Pedro 2:1-3

1 Pero hubo también falsos profetas en el pueblo, como habrá entre vosotros falsos maestros, que introducirán encubiertamente sectas de perdición, y negarán al Señor que los rescató, atrayendo sobre sí mismos perdición acelerada. 2 Y muchos seguirán sus perdiciones, por los cuales el camino de la verdad será blasfemado; 3 y por avaricia harán mercadería de vosotros con palabras fingidas, sobre los cuales la condenación ya de largo tiempo no se tarda, y su perdición no se duerme.

Aquí vemos como Dios habla de los tiempos actuales, en los que podemos ver como muchos manipulan La Biblia para sacar sus propios beneficios y comportándose como sectas que lo único que hacen es apartar a las personas del Señor y llevarlas por la senda del diablo, por las que ellos andan.

Así podemos ver como los ecuménicos y de la “Fe o prosperidad” desaniman a muchas personas a conocer el verdadero evangelio de Dios. Porque si una persona que ha visto los pecados de la Iglesia Católica con toda la idolatría e innumerables cosas más, descubre que en vez de predicar la verdad prefieren unirse con las tinieblas, sacaran unas conclusiones:

¿Si al final son lo mismo, que sentido tiene lo que predican? ¿No se cae así en el cinismo o hipocresía si al criticar a otros tú te unes con los que hacen lo mismo? ¿No dice Jesús constantemente que prediquemos con el ejemplo, porque ahora se va hacer de forma distinta, lo que estaba bien, ahora está mal? ¿O es que algunos se están dejando llevar por la corriente del mundo o del diablo?

Romanos 2:21-24

21 Tú pues, que enseñas a otro, ¿no te enseñas a ti mismo? ¿Tú, que predicas que no se ha de hurtar, hurtas? 22 ¿Tú, que dices que no se ha de adulterar, adulteras? ¿Tú, que abominas los ídolos, cometes sacrilegio? 23 ¿Tú, que te jactas de la ley, con rebelión a la ley deshonras a Dios? 24 Porque el Nombre de Dios es blasfemado por medio de vosotros entre los gentiles, como está escrito.

Esta es una triste verdad en nuestros días donde las personas conociendo la verdad prefieren mentir para agradar a las personas, teniendo un comportamiento falso que a lo único que les va a llevar es al padre de mentiras el DIABLO. Porque aunque duela es mejor decir la verdad, dado que quizás algún día esa persona se dé cuenta de su error y pueda rectificar, si es esa la voluntad de Dios.

Estas personas como viene arriba no se van a quedar sin castigo, porque otra cosa serán las engañadas, pero las que sabiendo el engaño permanecen en él y lo predican, ya tienen condenación y como dice el Señor esto no se tarda.

Lo que estamos viendo actualmente es muy grave, porque una cosa es que estas personas se engañen así mismas y otra cosa es que engañen a otras, porque con esto lo único que hacen es hacer la obra del diablo y dificultar la distribución de la palabra de Dios y de la verdad que todo el mundo debería de conocer, la verdad de que todos los que aceptan a Jesús como Señor y salvador, y hacen su voluntad son salvos y reinaran con él, y esto es gratuito y a los que cobran dinero por esto, se venden como hace más de 2000 años se vendió Judas, por 30 míseras monedas de plata.

1 Corintios 3:15-19

15 Mas si la obra de alguno fuere quemada, será perdida; él empero será salvo, mas así como pasado por fuego.

16 ¿O no sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros? 17 Si alguno violare el templo de Dios, Dios destruirá al tal, porque el templo de Dios, el cual sois vosotros, santo es.

18 Nadie se engañe a sí mismo; si alguno entre vosotros parece ser sabio en este siglo, hágase loco, para ser de veras sabio.

19 Porque la sabiduría de este mundo, locura es acerca de Dios; porque escrito está: El, que prende a los sabios en la astucia de ellos.