Cristianismo y Humanismo de la Iglesia Primitiva a la Iglesia actual 1º Parte

22.05.2015 17:29

La iglesia primitiva estaba fundada en dos concepciones sobre la que está fundada la fe, la primera es que la creencia de la fe esta cimentada sobre la palabra de Dios como la única autoridad final, y la segunda, que en el mundo existe un Dios santo que exige una perfección moral, "Sed santos como yo soy santo" (1º Co 1:2;1ºPedro 1:15,16), frente al relativismo moral del mundo que se basa en la propia moral o conciencia de la persona.

 

Los Primeros Cristianos:

 

En los primeros cristianos no era de extrañar, que su única fuente externa de autoridad fuera la palabra de Dios, por su pasado judío. Eso no fue algo extraño, aunque quizás si se liberaban del conjunto de normas judías que en el *sanedrín se les imponía, y que en la mayoría de los casos eran ajenas a la palabra de Dios, como aquí dice, cuando dijo Jesús: "Habéis invalidado la palabra de Dios con vuestros mandamientos"(Mateo 15:6,9 Marcos 7:7), dando así Jesús a la palabra de Dios, su valor autentico.

 

* Sanedrín: (hebreo antiguo: סַנְהֶדְרִין sanhedrîn, griego antiguo: Συνέδριον, synedrion 'simposio' y de ahí 'asamblea, comité') era, en el Antiguo Israel, una asamblea o consejo de sabios estructurado en 23 jueces en cada ciudad judía. A su vez, el Gran Sanedrín era la asamblea o corte suprema de 71 miembros del pueblo de Israel.

 

Así con esta visión de la palabra de Dios se tenía una autoridad no humanista. Es cierto que nos encontramos con el dilema del pecado, este existe, lo vemos a diario en numerosos sucesos *luctuosos, pero también en nuestra vida sabemos que no llegamos a esa perfección que Dios nos demanda, "por qué lo que quiero hacer  no hago y hago aquello que no quiero"(Romanos 7:15).

 

*Luctuoso: Triste, fúnebre y digno de llanto.

 

 

En las palabras del apóstol Pablo, decía en otra ocasión esto,  "porque aún no lo he conseguido"(Filipenses 3:10-14), y leyéndolo entendemos, que habla de la perfección moral y de cómo llegar a ser como Jesús "y llegar a la medida de un varón a la medida de Jesús"(Efesios 4:13).

 

Así vemos como grandes hombres de fe han tenido traspiés, pero gracias a Dios y concretamente, a Jesús, todos tenemos solución, como cita aquí, "pero si alguno hubiera pecado abogado tenemos para Dios a Jesucristo"(1ºJuan 2:1).

 

También vemos cuando el Emperador Constantino, hizo oficial el cristianismo en el Imperio Romano, esto hizo así que se trastocase el orden y  esta pureza del cristianismo primitivo, y se infiltraron intereses políticos y humanistas para dar satisfacción a los dirigentes y a la gran masa de población del Imperio.

 

Así la salvación en vez de basarse sobre la obra de Jesucristo también se añadieron las "obras" como elemento de salvación, así la salvación pasaba a tener un elemento humanista, el esfuerzo humano para la salvación.

 

El hombre se colocaba así a la altura de Dios, y del sacrificio expiatorio de Cristo, contradiciendo la palabra que dice "porque no hay otro nombre dado en la tierra a los hombres en el que podamos ser salvos Jesucristo "(Hechos 4:12)"Todo lo que pidáis al Padre en mi nombre os será dado"(Juan 14:13), así Dios elimina cualquier intervención humana en la salvación.

 

 

El Catolicismo y el humanismo:

 

En el ámbito católico-romano, el humanismo se dio en tres ámbitos: la misa,  en  el que el cuerpo de Cristo se ofrece diariamente en sacrificio continuo, como dice S. Pablo en la carta a los hebreos "el sacerdote ofrece diariamente sacrificios que no pueden perdonar los pecados" (Hebreos 10:11), lo cual los convierte a estos sacrificios en el que se ofrece el cuerpo de Cristo en "estériles o muertos".

 

Ya que Cristo se ofreció una vez por los pecados y fue un sacrificio perfecto aceptado por Dios para perdón,  de los pecados para aquellos que quieran aceptar a Jesús como su Señor y Salvador "Se ha sentado a la diestra del Padre" (Hebreos 10:12,1ºPedro 3:22) El cual está a la diestra de Dios, habiendo subido al cielo; estando a él sujetos los ángeles, y las potestades, y virtudes.

 

El segundo elemento es la penitencia, el creyente católico debe intervenir en su perdón, como si la obra de Jesús fuera incompleta, tiene que ayudar a Dios, y Dios no necesita muletas;

 

(Lucas 5:17-26), "Y trajeron a un lisiado y le introdujeron por el tejado por la gran cantidad de personas que estaban alrededor de la casa en la que estaba Jesús, Jesús le dijo tus pecados te son perdonados, y se escandalizaron de él, quien puede perdonar pecados sino Dios, dijo Jesús que murmuráis entre vosotros, para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene poder para perdonar pecados a ti te digo levántate y anda. Y el hombre se levantó tomando su lecho se fue glorificando a Dios.

 

No le pidió ninguna penitencia fue un perdón absoluto, Dios perdona y no necesita muletas, ni ayudas humanas.

 

2ºParte este Domingo en Evangélicos de Castilla.

Con la colaboración especial:Ministerio de la Palabra.

Basado en el libro de Schaeffer.